La destrucción de la realidad llegará antes de dos años

En los últimos años, hemos presenciado un avance sin precedentes en el desarrollo de Inteligencias Artificiales (IA), especialmente en el ámbito de la generación de contenidos.


Estas tecnologías han alcanzado un nivel de sofisticación que les permite crear textos, imágenes, videos y voces que son prácticamente indistinguibles de los creados por seres humanos. Si bien estos avances ofrecen oportunidades emocionantes en diversos campos, también plantean serias amenazas para nuestra percepción de la realidad.

La distorsión de la realidad a través de IA

La capacidad de las IA para generar contenidos falsos ha llevado a una proliferación de desinformación en Internet y las redes sociales. Los deepfakes y las noticias falsas se propagan a una velocidad alarmante, dificultando la distinción entre lo real y lo ficticio. Esto tiene implicaciones profundas en varios ámbitos:

  • Política: La desinformación puede influir en procesos electorales, manipular la opinión pública y socavar la confianza en las instituciones democráticas.
  • Seguridad: La propagación de información falsa puede generar pánico, incitar a la violencia o ser utilizada como herramienta en ciberataques y espionaje.
  • Economía: Las noticias falsas pueden afectar los mercados financieros, manipular inversiones y dañar la reputación de empresas.
  • Sociedad: La difusión de contenidos engañosos puede exacerbar divisiones sociales, fomentar prejuicios y erosionar la confianza entre individuos.

Medidas para mitigar el problema

Como usuarios de medios de comunicación y redes sociales, tenemos un papel crucial en la mitigación de este problema. Aquí hay algunas acciones que podemos tomar:

  1. Educación digital: Informarse sobre cómo funcionan las IA y cómo se generan los contenidos falsos es esencial para detectarlos.
  2. Verificación de fuentes: Antes de compartir información, es importante verificar su origen y consultar fuentes confiables.
  3. Uso de herramientas de detección: Existen aplicaciones y extensiones de navegador diseñadas para identificar deepfakes y noticias falsas.
  4. Pensamiento crítico: Cuestionar la veracidad de la información y considerar posibles sesgos o intenciones detrás de su difusión.
  5. Configuración de privacidad: Ajustar las configuraciones de privacidad en redes sociales para limitar la exposición a contenidos no verificados.
  6. Reportar contenidos falsos: Utilizar las funciones de las plataformas para denunciar información engañosa o perjudicial.
  7. Promover la alfabetización mediática: Fomentar en nuestro entorno la importancia de consumir y compartir información responsablemente.

La amenaza de la distorsión de la realidad a través de contenidos generados por IA es un desafío que requiere atención inmediata. Si bien la tecnología avanza rápidamente, es fundamental que como sociedad desarrollemos estrategias para preservar la integridad de la información y proteger nuestra percepción colectiva de la realidad. La colaboración entre gobiernos, empresas tecnológicas y usuarios es esencial para enfrentar este reto y asegurar un futuro donde la información veraz prevalezca.


El siguiente gráfico muestra el crecimiento del riesgo de destrucción de la realidad en los últimos 20 años, correlacionando dos variables principales:

  • Lanzamientos de modelos de IA avanzados: Representado por una línea  que marca hitos importantes en el desarrollo de IA (por ejemplo, 2014: lanzamiento de GANs; 2018: GPT-2; 2020: GPT-3; 2023: modelos de difusión avanzados).
  • Crecimiento de contenidos falsos publicados: Representado la curva exponencial que refleja el aumento en la cantidad de contenidos generados por IA que se difunden en línea.

El gráfico ilustra cómo, a medida que se han lanzado modelos de IA más sofisticados, ha habido un incremento significativo en la creación y propagación de contenidos falsos, elevando el riesgo de distorsión de la realidad.